Evertec
29/12/2025

La evolución cultural que nos prepara para 2026

En 2025, Evertec apostó por decisiones conscientes que integraron cultura, bienestar y tecnología, consolidando una organización más inclusiva, innovadora y conectada con su propósito. Destacan la integración del bienestar en...

Comparte:

Cerrar un año es una oportunidad para ir más allá de los resultados y detenernos a reflexionar sobre la evolución real de nuestra organización, reconociendo los avances culturales que marcaron un antes y un después en nuestra forma de trabajar.

En Evertec, el 2025 fue un año de decisiones intencionales que reafirmaron una convicción clave: la cultura no es un concepto abstracto, sino el sistema que impulsa y sostiene la estrategia, potencia la innovación y conecta a las personas con un propósito compartido.

Cada iniciativa, cada conversación y cada espacio de intercambio nos permitieron reafirmar que la evolución organizacional se construye a través de decisiones conscientes que conectan propósito, talento e innovación. Este año aprendimos que la evolución organizacional ocurre cuando la cultura acompaña la estrategia, se generan entornos donde las personas pueden dar lo mejor de sí y contribuir de manera significativa al crecimiento del negocio.

Uno de los avances más relevantes fue fortalecer la conexión entre nuestros valores, la misión y el bienestar de las personas. El bienestar dejó de ser un componente aislado para integrarse de forma natural en la manera en que lideramos, tomamos decisiones y nos relacionamos. Esta integración fortaleció la confianza, el compromiso y la coherencia cultural, reafirmando que una organización saludable es la base de un desempeño sostenible y de largo plazo.

Este enfoque se reflejó de forma tangible en iniciativas que impulsaron el sentido de pertenencia. Programas como el de reconocimiento Valoro, que generó más de 4,000 reconocimientos, ayudaron a visibilizar comportamientos alineados a nuestros valores y a construir un lenguaje común de gratitud y colaboración. Más allá de los números, el verdadero impacto estuvo en cómo las personas se sintieron reconocidas, apreciadas y conectadas con un propósito compartido.

El compromiso con la conexión y el bienestar también se reflejó en nuestra apuesta por la diversidad, equidad e inclusión. A través de la comunidad WIN (Women Inspirational Network), generamos espacios para visibilizar el liderazgo femenino y fortalecer la colaboración. Con 11 encuentros, abordamos temas estratégicos como tecnología, liderazgo adaptativo y bienestar, además de impulsar networking y perfiles inspiradores. Estas iniciativas no solo potenciaron el talento femenino, sino que consolidaron una cultura inclusiva que impulsa innovación y crecimiento.

De igual forma, en un entorno de constante transformación, descubrimos que el desarrollo del talento es la mejor inversión para la sostenibilidad y apostamos por una cultura de aprendizaje continuo enfocada en construir habilidades críticas para el futuro. A través de más de 233,511 horas de formación y nuevas herramientas para líderes y equipos, reforzamos una mentalidad de servicio al cliente, agilidad, adaptación y crecimiento. Este enfoque permitió potenciar habilidades, fomentar la adaptabilidad y acompañar a nuestros equipos en su crecimiento profesional, fortaleciendo una mentalidad de evolución constante.

La innovación también desempeño un rol fundamental en este camino. La integración de inteligencia artificial en procesos internos, acompañada de una sólida gobernanza y programas de capacitación que alcanzaron a más de 4,800 colaboradores, impulsó nuevas formas de trabajar más ágiles, eficientes y colaborativas. La innovación dejó de percibirse como un esfuerzo tecnológico para convertirse en una capacidad cultural, donde la tecnología amplifica el talento humano y libera espacio para el pensamiento estratégico y la colaboración.

A lo largo del año, el liderazgo continuó evolucionando hacia un modelo más cercano, empático y consciente. La claridad, la adaptabilidad y la autenticidad se reafirmaron como elementos esenciales para liderar en contextos dinámicos. Liderar desde el ejemplo se consolidó como un pilar que fortalece la confianza y promueve entornos donde las personas pueden desarrollarse plenamente.

Todo lo construido nos deja aprendizajes valiosos y una base sólida para seguir avanzando con mayor claridad los retos que se avecinan. El futuro pertenece a las organizaciones que logran conectar cultura, talento y tecnología para impulsar desempeño con propósito; que equilibran innovación con humanidad; y que construyen espacios donde personas y negocio crecen juntos. Prepararnos para el futuro implica seguir fortaleciendo liderazgos más empáticos, culturas centradas en habilidades, bienestar como habilitador del desempeño y una adopción consciente de nuevas tecnologías.

El 2025 nos demostró que cuando los valores se viven, la misión se siente, y la cultura se convierte en una ventaja real y motor de la transformación. Hoy avanzamos con mayor claridad y confianza hacia el 2026, conscientes que la evolución cultural que sembramos hoy es lo que nos permitirá liderar los desafíos del mañana. La pregunta es: ¿qué decisiones culturales se vendrán en las organizaciones para prepararse l para el futuro que está por venir?

Publicaciones relacionadas

Con más de 200 startups apoyadas, expansión internacional y estudios inéditos sobre innovación abierta, el hub de innovación de Evertec fortalece

El bazar navideño más grande de Puerto Rico reunirá a 500 comercios locales en un ambiente festivo y libre de costo.

Obtén acceso a las tendencias del mercado financiero

Recibe de primera mano los contenidos producidos por expertos del mercado financiero.